Viajé a Los Ángeles con mi marido, fue nuestra luna de miel. Decidimos California porque los dos somos enamorados del surf, y todos los amantes del surf han soñado alguna vez en hacer una ruta por California. La agencia IEST Viajes nos organizó todo, nosotros sólo decidimos el destino, que por nuestra parte lo teníamos hablado desde hacía bastante tiempo, y ellos se encargaron de todo lo demás. Estamos muy contentos y guardamos un especial recuerdo de nuestra aventura californiana y del servicio de esta agencia de viajes en cuestión, por este motivo me animo a compartirlo en su blog.

Cuando llegas a California notas el contraste, el clima es muy duro y seco, en ocasiones el tráfico es una locura y puedes encontrarte algunas playas masificadas repletas de surfistas, pero cualquier persona que sepa surfear, saber estar y comportarse en el agua no tendrá problemas.

Nosotros en concreto, decidimos no llevarnos nuestras tablas de surf y alquilarlas allí por no viajar tan cargados, además íbamos a conocer varias playas y queríamos disfrutar sin preocupaciones.

Visitamos Santa Bárbara, uno de los epicentros del surf californiano, es uno de los sitios de más leyenda. Además Santa Bárbara tiene mucha vida nocturna y muchas tiendas para disfrutar fuera del agua, algo curioso que visitamos fue una tienda museo donde cuelgan de sus paredes las tablas de los mejores riders del shaper en los últimos años. De Santa Bárbara fuimos a Ventura, donde se encuentran muchas de las mejores olas.

A parte del deporte, los Ángeles es una cita obligada al igual que San Francisco o San Diego si quieres visitar y conocer un poco más a fondo California. Ciudades en las que pasamos dos noches en cada una de ellas en estupendos hoteles de cinco estrellas. Incluso tuvimos la suerte de comprar unas entradas para ver un partido de la NBA.

Pero un lugar que sin duda me enamoró fue Victoria Beach. Es una larga playa de arena blanca al sur de Victoria Drive en Laguna Beach. La mayor parte de esta playa con orientación al oeste se encuentra en frente de una urbanización de lujo. El acceso a la playa pública no es fácil de ver. Mi marido y yo caminamos sobre las rocas y cerca de la escalera de acceso y cuál fue nuestra sorpresa cuando vimos la torre de estilo victoriano construido en 1920. Cerca hay también una piscina circular de hormigón que se llena con arena y agua salada de las olas. Un paraíso digno de ver.

Lola de San Sebastián.