Sonará cursi, pero me apetecía mucho disfrutar de un destino tan romántico como Venecia con mi pareja aprovechando que hacíamos cinco años juntos. Aterrizamos y cogimos directamente una lancha para ir adentrándonos en la preciosa ciudad navegando por sus lagunas.

Así llegamos hasta el hotel Belmond Cipriano. Queríamos un buen hotel y desde luego no nos equivocamos con la elección. Está en la isla de Giudecca, desde donde se puede disfrutar de unas vistas espectaculares de Venecia. Cuenta con unas instalaciones de lujo, pero sobre todo destacaría su restaurante gourmet, que tiene una preciosa terraza de madera con vistas a San Marcos, que se encuentra muy cerca.

Los siguientes tres días los pasamos recorriendo algunos de los lugares más encantadores de Venecia. Destacaría el Palazzo Ducale, Ponte Rialto y el Barrio Judío. Muy recomendables las visitas a las islas Murano, Burano con sus casas coloridas y Torcello. Disfrutamos muchísimos los paseos en góndola por los canales.

Ha sido un puente para recordar. Vuelvo enamorada de esta hermosa ciudad donde he pasado unos días estupendos con mi pareja.

Muchas gracias a IEST por su profesionalidad y hacérnoslo todo tan fácil.


María Ángeles, Gijón.